
Los griegos lo llamaban Paideia, era el arte de educar a un hombre, de hacer de un niño un hombre que honre a sus dioses y a su patria, digno de sus antepasados, que conozca cual es el camino del bien y del honor. La educación concierne tanto a la persona como a la comunidad; ahora la educación tiene mucho que ver con las televisiones.
En la cadena de la conferencia episcopal promocionan la venta de una serie para jóvenes de los años 80 “Verano azul” y eso porque según nuestros obispos es muy formativa, a diferencia de las que están programando actualmente. Para mí que aquella serie de envoltorio tan cursi era el primer prototipo de una larga colección dedicadas a los adolescentes cuyo último producto de éxito es “Física o Química”, una verdadera joya de la televisión.
Si alguien se pregunta porque en España el aborto está tan extendido, porque la homosexualidad goza de tanta consideración social o porque aquí se necesita una receta medica para comprar un analgésico para un dolor de muelas pero una adolescente de diez y seis años puede adquirir una pastilla para abortar sin receta y sin que lo sepa su madre, sólo tiene que ver un capítulo de “Física o Química”. Desde hace más de veinte años este tipo de series se han emitido sin cesar, temporada tras temporada por todas las cadenas de televisión: es la Paideia de la democracia española. Educar con la televisión para producir escoria humana, por supuesto escoria de izquierdas, obvio. ¿Educación para la ciudadanía?. No Zapatero, no: “educación para la mierda”, ese es el título correcto y que el ministerio se ahorre el gasto en libros, un DVD con capítulos de “Física o Química” será más útil y apropiado . Por cierto la imagén que acompaña esta entrada es de uno de los actores más populares de esta serie cuyos personajes juveniles se pueden clasificarse por lo general en macarras, traficantes de droga, putas y maricones. Dejamos al lector que decida a que grupo asigna la criaturita de la foto que responde al nombre tan español de Angy.
Deja una respuesta